¿Has oído hablar de la palabra “sinergia”?
Es un fenómeno que se produce cuando al combinar varios elementos el resultado es mayor que la simple suma de las partes.
La forma típica de expresarlo es cuando decimos que uno más uno es igual a tres.
¿Qué tiene que ver todo esto con el branding?
En el curso hablo de este tema (y de muchas cosas más), pero deja que te explique algunas claves.
Un cliente potencial entra en contacto con tu marca varias veces a lo largo del tiempo:
Primero lee un post en tu blog, después recibe tu email de bienvenida tras suscribirse a tu newsletter, unos días más tarde ve un anuncio tuyo en Facebook…
Y así hasta el infinito, en función de la pasta que te estés gastando en marketing.
Si queremos conseguir que esas interacciones no sean elementos aislados, debemos mantener la consistencia de marca en cada contacto.
Es así como creamos una sinergia de marca y hacemos que cada contacto se sume al anterior.
Si tratamos cada contacto como un elemento aislado, ocurre todo lo contrario: es como empezar de cero cada vez.
Es como si tu cliente potencial tuviese que volver a conocerte cada vez que te ve.
Esto puede parecer un detalle sin importancia, pero tiene un gran impacto en las conversiones y en la eficacia de tus acciones de marketing.
Pero la cosa no acaba aquí…
Si además de consistencia incorporamos un significado a nuestra marca, el impacto es mayor.
Cuando digo “significado” me refiero a unos valores y un posicionamiento. Una narrativa de marca concreta que está conectada con la visión del mundo de nuestra audiencia.
Todo aquello que implique una conexión emocional con nuestra audiencia, aumenta nuestras probabilidades de éxito.
Según el estudio Meaningful Brands, hay una estrechísima relación entre la eficacia de un contenido y el impacto que tiene una marca en nuestra vida.
¿En qué se traduce todo esto?
Desde un punto de vista práctico, la consistencia de marca y el significado de nuestra marca, afecta a nuestro negocio en 2 niveles:
- Las conversiones
- El proceso de decisión de compra
¿Cómo afecta el branding a tus conversiones?
Desde luego, un diseño que tenga la jerarquía de los mensajes bien definida y use el contraste para atraer la atención hacia los elementos clave, conseguirá más conversiones.
Pero yo voy un poco más allá.
Una buena experiencia de marca favorecerá conversiones futuras.
A medida que alguien va entrando en contacto con tu marca de forma reiterada, se van creando una serie de estructuras mentales que afectan a la percepción que esa persona tiene sobre la marca.
Esas percepciones entrarán en juego la próxima vez que haya un contacto.
Todo lo que hagas hoy contribuirá a mejorar las campañas que hagas en el futuro si logras crear esta familiaridad.
¿Cómo afecta el branding a las decisiones de compra?
Básicamente hace que el customer journey sea más corto.
Traducción: tu cliente potencial tarda menos en tomar una decisión de compra.
Según Sales Force, una persona necesita entre 6 y 8 interacciones con una marca para convertirse en un verdadero cliente potencial (lead).
Oh, sorpresa. Nadie se casa contigo en la primera cita.
Porque lo primero que necesita alguien para tomar la decisión de comprar un producto en tu ecommerce o pedirte un presupuesto es la confianza.
En el proceso de decisión de compra influyen muchas cosas. Entre otras:
- Tu reputación/posicionamiento
- La experiencia de usuario
- La naturaleza de tu producto (compra por impulso vs. compra reflexiva)
- El texto de tu página de venta
- La opinión de terceros
- El precio
- …
Si te fijas, muchos de los puntos de esta lista tienen una sola misión: crear confianza.
Y una de las cosas que hace el branding es precisamente crear un clima de confianza y familiaridad entre una persona y un producto/servicio.
¿Cómo lo hace?
- Lanzando un mensaje valiente y creíble que te diferencie del resto del mercado.
- Mostrando una imagen profesional, basada en códigos visuales afines al público objetivo.
Si eres capaz de crear confianza desde la primera interacción y mantienes el listón alto en la segunda y en la tercera, la percepción de riesgo se diluye y el proceso de decisión se comprime.
¿Te salen las cuentas?
Muchas veces cuando hablamos de branding nos quedamos en lo bonita o fea que es una marca, cuando en realidad su impacto va más allá de la estética.
Incluso cuando sacamos la calculadora, una marca bien construida tiene mucho que decir.
Asi es creo que tienes razón Samu
Un saludo
Gracias Miguel!
Magnífico post, Samu. Muy de acuerdo con lo que comentas y con la claridad con que lo haces.
Muchas gracias!
Que interesante Samu! Que la “percepción del riesgo” sea inversamente proporcional a la consistencia de la imagen de marca y su mensaje… En realidad es igual que ocurre con las personas con las que nos relacionamos. Confías mucho más en alguien con una imagen estable y un mensaje consistente que en alguien que va cambiando de identidad incluso de personalidad cada 2 × 3 …
Exactamente! Nuestra relación con las marcas tienen mucho de personal y las empresas cada vez se esfuerzan más en crear ese tipo de relación. De hecho, la expresión «personalidad de marca» no es casualidad jejeje
Un abrazo!
Hola Samu
Soy Yvonne psicóloga especializada en resolver problemas o conflictos de pareja y familia, mediante en primer lugar la comunicación efectiva, me gustaría qué si tienes tiempo, me aconsejes en qué fallo con mis textos
Hola Ivonne! Contacta conmigo a través del formulario de contacto y lo vemos. :)